Recuerdo cuando le llamé para comentarle que juguemos al ping-pong de los dibus y sin preguntar de qué se trataba dijo SIIIIIII!!! Le propuse que yo haría un primer dibu y se lo enviaría para que ella haga otro y así sucesivamente hasta completar un gran cuadro con estilos mezclados.
A ella le encantó la idea y a mi me encantó el hecho de que una gran diseñadora e ilustradora me diera el placer de dibujar con ella.
Pasó el tiempo y lo que pensamos que iba a durar unos días se prolongó a casi 10 meses jajajaj,
De todas maneras no nos desanimamos y en cada tiempo libre que teníamos continuábamos con nuestra labor. Nuestra meta era terminar nuestro dibu sin importar el tiempo que estemos en ello.
No se esfuercen en buscar un significado o un mensaje, simplemente vean nuestra esencia y lo que somos plasmado en nuestra obra, que al fin se finalizó.
Gracias Andi por animarte a jugar a los dibus.